domingo, 24 de mayo de 2015

Manuel Sanchez Monge, obispo bueno, va a Santander

 

MONS. SÁNCHEZ MONGE, EN SU DESPEDIDA DE LA DIÓCESIS

 

Felices los fieles de Santander que van a tener como pastor a este hombre de Dios.

“Siempre os tendré presentes porque habéis sido mis primeros fieles”

 
 
Arropado por sus fieles y por medio centenar de sacerdotes se ha despedido de La Mariña Manuel Sánchez Monge, tras casi diez años al frente de la Diócesis de Mondoñedo-Ferrol .
 
Desde el altar rememoró aquel 23 de julio de 2005 en que fue ordenado en la Plaza de la Catedral de Mondoñedo. Con humildad hizo un repaso por su labor pastoral, en la que intentó acercarse a todos los colectivos, y subrayó ese gran acontecimiento que ha dejado una huella profunda: el Primer Congreso de Laicos.
Explicó una vez más el motivo de su marcha: “los obispos no pedimos ser cambiados ni pedimos el traslado de una Diócesis, es el Santo Padre el que, recibidos los debidos informes, nos traslada en un determinado momento. Para mí es un motivo de Paz el saber que voy a donde yo no lo he pedido y donde me manda la obediencia que debo al Santo Padre”.
 
Expresó su agradecimiento por el afecto que le han mostrado los diocesanos - “verdaderamente me he sentido acogido, ya desde el primer momento”- y alabó la labor que desarrollan sus compañeros párrocos, “sin vosotros, queridos hermanos sacerdotes, no hubiera podido hacer prácticamente nada”.
 
El Obispo electo de Santander y Administrador Diocesano pidió perdón por posibles errores -“si alguno tiene alguna queja contra mí le pido sinceramente disculpas”- e invitó a los fieles a recibir al próximo obispo con el mismo cariño con que lo acogieron a él.
Hubo momentos emotivos. A Manuel Sánchez Monge le tembló la voz con frases como: “siento pena al deciros adiós, porque el corazón sangra por donde ama” y “os llevo en mi corazón, siempre os tendré presentes porque habéis sido mis primeros fieles, y los curas lo saben bien, la primera parroquia a la que servimos es una Diócesis especial, es de alguna manera nuestro primer amor y el primer amor nunca se puede olvidar”.
 
Finalizó su intervención pidiendo a la Virgen de los Remedios y al patrón San Rosendo que “sigan ayudando a esta Diócesis y al que ha sido su pastor durante 10 años, que necesita ser sostenido por la oración de su fieles”.
 


“Un pastor asequible”

Manuel Sánchez Monge recibió palabras de agradecimiento y reconocimiento por parte de una diocesana y también del vicario general, Antonio Rodríguez Basanta. Este último describió con cariño al obispo, ensalzó su proximidad, trabajo y entrega y lo definió como “un pastor asequible, de trato fácil y gran sentido del humor”. También añadió al listado de méritos su interés por estar presente en las redes sociales y en los medios de comunicación.
Antonio Rodríguez Basanta afirmó que el 23 de julio de 2005 se hizo historia pues en la Diócesis no tenía lugar la ordenación de un obispo desde los años 40 del siglo pasado.
 
Al finalizar la celebración el vicario general entregó al Obispo una placa grabada y Monge saludó y abrazó a todos y cada uno de los fieles que abarrotaron el templo en su despedida oficial de Mondoñedo.
Por delante le queda otra despedida, el domingo en Ferrol. Y el próximo 30 de mayo tomará posesión de su nuevo cargo en la Diócesis de Santander.
¡Buena suerte!

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